Me hallaba limpiando mis zapatos blancos que... Ya no eran blancos, por el uso constante se habían vuelto amarillentos. Y al tratar de volverlos blancos de nuevo, cosa que pensé no poder hacer; recordé algo. Uno trata de volver a tener el color blanco de la vida.
Hay que iniciar una nueva forma de vida, actuar con sabiduría.
Cambiar las discusiones por diálogos serenos. Enfrentar las tempestades con fortaleza y fe, confiando en que Dios, está de nuestra parte, para otorgarnos la paz y claridad para encontrar la solución.
Ser bondadoso con los que necesiten ayuda, sin esperar nada a cambio.
Nunca perder la humildad.
Iniciar el día con un saludo afectuoso y entregar cariño y una sonrisa a quienes nos rodean.
Agradecer a Dios, por toda la belleza que ha creado para que nosotros disfrutemos.
Como la belleza de los prados y sus hermosas y aromática diversidad de flores.
El cantar de los pájaros.
Las hermosa vertientes con su agua pura y cristalina, hermoseando los paisajes.
Los mares y su diversidad de hermosos peces, con sus bellas formas y colores.
Las montañas cubiertas con su blanca nieve.
Los maravillosos amaneceres y ocasos, mostrando colores fantásticos e imaginables.
Nos queda la noche, para admirar todo el firmamento iluminado de estrellas, que de vez en cuando, nos envía una estrella fugaz para nuestro deleite y deseos.
¿Quién no ha pedido un deseo alguna vez?.
Cuando podemos pintar nuestra alma, de los mas hermosos colores.
"Dios nos da grandes alegrías cada dia".